Tatuaje al viento. Le sobraba la camiseta y, si no fuera de mal gusto, se hubiera quitado hasta las botas. Ayer Jonathan Viera tenía ganas de demostrar porqué todos los grandes de España se están fijando en él. Ha sido una semana dura para el futbolista. Criticado por querer progresar, criticado por querer irse y también por quedarse hasta final de año. Criticado por pesetero y por no dejar 3 millones en la arcas del club. A Viera se le iba a criticar cualquier decisión que tomase.
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| Jonathan Viera celebra el gol. Foto: Carlos Díaz-Recio |
Ayer el Gran Canaria volvió a entonar el ¡¡Viera, Viera!! tras estar toda la segunda parte silbando al equipo por el horroroso partido que hizo ante el Guadalajara. Ayer Viera ejerció de crack. Desde que Sureda Cuenca señaló la falta a Portillo en el 5 de descuento, Jonathan Viera actuó como un crack.
Fue el primero en pedir el balón. Lo plantó en el césped como Jonny Wilkinson y lo miró fijamente. Sólo él y el balón saben lo que pasó por la cabeza del "pibe de La Feria". Un dialogo exclusivo para los cracks. Sólo para aquellos que saben al dedillo el idioma del fútbol. Veinte interminables segundos para los que estábamos en la grada, pero suficientes para Viera.
Miró a la portería. Volvió a mirar al balón y, fue sólo entonces cuando se centró en la distancia y el ángulo. Le pegó a la pelota con fuerza y entonces el balón hizo el resto. Tuvo suerte, esa suerte que el fútbol destina a los mejores.
Ejerció de crack porque lo es, porque sabe hacerlo, y porque los aficionados de UD necesitan que lo sea. Por eso se quitó la camiseta y con rabia señaló su pecho diciendo "Yo, aquí". La grada le contestó con alabanzas. Viera, TÚ aquí, hasta que quieras.
La verdad que actúo como un crack metiendo ese gol que nos dió 3 puntos valiosos pero no hay que reducir su partido a una sola jugada. En este partido no se le vió, no ya que jugara mejor o peor, simplemente no compareció. Y creo que tuvo más personalidad David González a la hora de tirar el penalti (es más presión porque un penalti hay que meterlo sí o sí) que Viera en la falta, ya que esa falta algo lejana si la hubiera fallado no hubiera supuesto un error garrafal. Pero eso sí, coincido contigo que su gol fue de crack y se vivió un momento mágico en el estadio con la grada coreando su nombre segundos antes del lanzamiento de falta. Con lo de la semana, Si hubiera tomado la decisión de renovar con una claúsula coherente aún expresando que se queda hasta junio (para progresar el año que viene en Primera) no hubiera sido criticado porque la gente entendería que tiene nivel para mucho más, pero que no hay riesgo de que deje al club con una mano delante y otra detrás en un eventual traspaso a precio de saldo. Un saludo Jesús.
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